CM (24) - Hua I 93

Jedes Bewußtsein überhaupt ist entweder selbst schon vom Charakter der Evidenz, das ist hinsichtlich seines intentionalen Gegenstandes ihn selbstgebend, oder es ist 15wesensmäßig auf Überführung in Selbstgebungen angelegt, also auf Synthesen der Bewährung, die wesensmäßig zum Bereich des Ich kann gehören. Jedes vage Bewußtsein kann in der Einstellung transzendentaler Reduktion befragt werden, ob ihm und wie weit ihm unter Erhaltung der Identität des vermeinten Gegenstandes20 dieser im Modus des Er selbst entspricht bzw. entsprechen kann oder, was dasselbe, wie er, der vorausgesetzte, als er selbst aussehen müßte, wobei sich das noch unbestimmt Antizipierte zugleich näher bestimmte.
CM (24) 109 - Hua I 93

Toda conciencia, o tiene ya en sí misma el carácter de la evidencia, esto es, da auténticamente su objeto intencional, o tiende por esencia a darlo auténticamente, o sea, a síntesis de verificación que entran por su esencia en el dominio del "yo puedo". Toda conciencia vaga puede ser interrogada, en la actitud de la reducción trascendental, sobre si le es propio, o puede serlo, y hasta dónde, el objeto presunto en el modo del "él mismo", conservando por lo demás su identidad.

O lo que viene a ser igual, qué aspecto tendría por necesidad el objeto, el meramente supuesto por lo pronto, en cuanto fuese él mismo; con lo que al par se determinaría más lo anticipado indeterminadamente.