CM (9) - Hua I 62

Ähnlich also (Q.V.) betrifft die apodiktische Gewißheit der transzendentalen Erfahrung mein transzendentales Ich bin in der ihm anhaftenden unbestimmten Allgemeinheit eines offenen Horizontes. Das Wirklichsein des an sich ersten Erkenntnisbodens30 steht demnach zwar absolut fest, nicht aber ohne weiteres das, was sein Sein näher bestimmt und was während der lebendigen Evidenz des Ich bin noch nicht selbst gegeben sondern nur präsumiert ist.
CM (9) 65 - Hua I 62

análogamente (Q.V.) abarca la certeza apodíctica de la experiencia trascendental mi "yo existo" trascendental en la indefinida universalidad de un horizonte abierto inherente a él. La realidad de la base primera en sí del conocimiento es según esto absolutamente firme; pero no así sin más aquello que define de una manera más precisa la realidad de esta base, ni aquello que todavía no está presente ello mismo, sino que sólo está presumido, en el curso de la evidencia viva del "yo existo".