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Die formale Ontologie scheint zunächst mit den materialen Ontologien in einer Reihe zu stehen, sofern das formale Wesen eines Gegenstandes überhaupt und die regionalen Wesen beiderseits die gleiche Rolle zu 10spielen scheinen. Man wird daher geneigt sein, statt wie bisher von Regionen schlechthin, vielmehr von materialen Regionen zu sprechen, und ihnen nun die "formale Region" anzureihen. Wenn wir diese Redeweise annehmen, so bedarf es doch einiger Vorsicht. Auf der einen Seite stehen materiale, und das sind in 15gewissem Sinne die "eigentlichen" Wesen. Auf der anderen Seite aber steht zwar ein Eidetisches, aber doch grundwesentlich Verschiedenes: eine bloße Wesensform, die zwar ein Wesen, aber ein völlig "leeres" ist, ein Wesen, das in der Weise einer Leerform auf alle möglichen Wesen paßt, das in 20seiner formalen Allgemeinheit alle, auch die höchsten materialen Allgemeinheiten unter sich hat und ihnen durch die ihr zugehörigen formalen Wahrheiten Gesetze vorschreibt. Die sog. "formale Region" ist also doch nicht etwas {22}den materialen Regionen (den Regionen schlechthin) Koordiniertes, sie ist 25eigentlich nicht Region, sondern leere Form von Region überhaupt, sie hat alle Regionen mit allen ihren sachhaltigen Wesensbesonderungen statt neben sich, vielmehr (wenn auch nur formaliter) unter sich.
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La ontología formal parece, por el pronto, entrar en una misma serie con las ontologías materiales, en cuanto que la esencia formal de un objeto en general y las esencias regionales parecen desempeñar una y otras el mismo papel. Se sentirá, por ende, la inclinación a hablar, en lugar de regiones pura y simplemente, como hasta aquí, más bien de regiones materiales, y a agregar a éstas la "región formal". Si aceptamos este modo de hablar, es menester, sin embargo, cierta cautela. Hay, por un lado, esencias materiales, que son, en cierto sentido, las "verdaderas" esencias. Mas, por otro lado, hay, sin duda, algo eidético, pero, sin embargo, radical y esencialmente distinto: una mera forma de esencia, que es, sin duda, una esencia, pero una esencia completamente "vacía", una esencia que se ajusta a la manera de una forma vacía a todas las esencias posibles; que en su formal universalidad tiene bajo sí todas las universalidades materiales, incluso las más altas, y les prescribe leyes por medio de las verdades formales relativas a ella. La llamada "región formal" no es, pues, algo coordinado a las regiones materiales (las regiones, pura y simplemente); no es propiamente una región, sino la forma vacía de región en general, que en lugar de tener junto a sí, tiene más bien bajo sí (aunque sólo formaliter) a todas las regiones con todos sus casos esenciales especiales o dotados de un contenido material.