I1 (25) - Hua III/1 52

Am korrektesten weisen wir aber gegenüber all solchen Ausdeutungen,[53] (Q.V.) anstatt uns argumentierend auf ihren Boden zu stellen, auf den eigenen Sinn mathematischer Behauptungen hin. Um zu wissen und zweifellos zu wissen, was ein mathematisches Axiom aussagt, haben wir uns nicht an den empiristischen Philosophen,5 sondern an das Bewußtsein zu wenden, in dem wir mathematisierend die axiomatischen Sachverhalte in voller Einsicht erfassen. Halten wir uns rein an diese Intuition, so unterliegt es gar keinem Zweifel, daß in den Axiomen reine Wesenszusammenhänge ohne die leiseste Mitsetzung von Erfahrungstatsachen zum 10Ausdruck kommen.
I1 (25) 60 - Hua III/1 52

Pero lo más correcto que podemos hacer frente a todas las [53]interpretaciones semejantes, (Q.V.) no es ponernos, argumentando, en su terreno, sino acudir al sentido propio de las proposiciones matemáticas. Para saber, y saber sin duda alguna, lo que enuncia un axioma matemático, no debemos volvernos hacia el filósofo empirista, sino hacia la conciencia en que, al hacer matemáticas, aprehendemos las relaciones axiomáticas con plena evidencia intelectual. Si nos atenemos puramente a esta intuición, no puede caber duda alguna, en absoluto, de que en los axiomas encuentran su expresión puras relaciones esenciales, sin que se pongan a la vez, ni en la forma más leve, hechos de experiencia.