I1 (56) - Hua III/1 124

Verbleibt uns als Residuum der phänomenologischen Ausschaltung der Welt und der ihr zugehörigen empirischen Subjektivität ein reines Ich (und dann für jeden Erlebnisstrom ein prinzipiell {110}verschiedenes), dann bietet sich mit ihm eine eigenartige 5--- nicht konstituierte --- Transzendenz, eine Transzendenz in der Immanenz dar. Bei der unmittelbar wesentlichen Rolle, die diese Transzendenz bei jeder cogitatio spielt, werden wir sie einer Ausschaltung nicht unterziehen dürfen, obschon für viele Untersuchungen die Fragen des reinen Ich in suspenso bleiben können. 10Aber nur soweit, wie die unmittelbare evident feststellbare Wesenseigentümlichkeit und Mitgegebenheit mit dem reinen Bewußtsein reicht, wollen wir das reine Ich als phänomenologisches Datum rechnen, während alle Lehren über dasselbe, welche über diesen Rahmen hinausreichen, der Ausschaltung verfallen sollen.
I1 (57) 133 - Hua III/1 124

Pero si nos queda, como residuo del desconectar fenomenológicamente el mundo y la subjetividad empírica inherente a éste, un yo puro (y un yo diverso por principio para cada corriente de vivencias), entonces se nos presenta con él una trascendencia sui generis ---no constituida---, una trascendencia en la inmanencia. Dado el papel inmediatamente esencial que desempeña esta trascendencia en toda cogitatio, no podremos someterla a una desconexión, bien que para muchas investigaciones puedan quedar in suspenso las cuestiones del yo puro. Pero sólo hasta donde alcance, con la conciencia pura, el darse y el tener una esencia peculiar comprobables por una evidencia directa, contaremos el yo puro por un dato fenomenológico, en tanto que deben sucumbir a la desconexión todas las doctrinas sobre el mismo que rebasen este marco.