I1 (61) - Hua III/1 132

Das uns in ihrer [die erweiterte phänomenologische Reduktion] Folge beherrschende praktische Bewußtsein, daß, wie die Sphäre der natürlichen Welt, so auch all diese eidetischen Sphären prinzipiell für den Phänomenologen hinsichtlich ihres wahrhaften Seins nicht als gegeben gelten dürfen; daß sie für die 20Sicherung der Reinheit seiner Forschungsregion urteilsmäßig eingeklammert werden müssen; daß all den bezüglichen Wissenschaften kein einziger Lehrsatz, ja nicht einmal ein Axiom entnommen und als Prämisse für phänomenologische Zwecke zugelassen werden darf --- wird nun von großer methodologischer Bedeutung. 25Eben dadurch schützen wir uns methodisch vor jenen Vermengungen, die zu tief in uns, als geborenen Dogmatisten, verwurzelt sind, als daß wir sie sonst vermeiden könnten.
I1 (61) 141 - Hua III/1 132

La conciencia práctica, que nos domina a consecuencia de ella [la reducción fenomenológica ensanchada], de que, lo mismo que la esfera del mundo natural, tampoco ninguna de estas esferas eidéticas debe por principio valer para el fenomenólogo como dada en su verdadero ser; de que para asegurar la pureza de su campo de investigación tienen que colocarse entre paréntesis los juicios correspondientes; de que a ninguna de las ciencias respectivas es lícito tomar un solo teorema, ni siquiera un solo axioma, para utilizarlo como premisas a los fines de la fenomenología ---resulta ahora de gran significación metodológica. Justo gracias a ella nos protegemos metódicamente contra aquellas confusiones que están demasiado arraigadas en nosotros, como dogmáticos innatos que somos, para que pudiéramos evitarlas de otra manera.