I2 (18b) - Hua IV 62

Der Relativismus der Raumdinge in Beziehung auf andere bestimmt den Sinn der Dingveränderung.35 (Q.V.) Dazu gehören aber keineswegs die psychophysischen Konditionalitäten. Das muß man vor Augen haben. In die Kausalzusammenhänge greift nun aber auch wie selbstverständlich mein Leib mit ein: ist er als Ding im Raum aufgefaßt, so ist er ja nicht als [63]bloßes Schema sondern als Kreuzungspunkt von realen Kausalitäten im realen (ausschließlich raumdinglichen) Zusammenhang aufgefaßt. In diesen Bereich gehört z.B., daß ein Stoß meiner Hand (rein als dingkörperlicher Stoß betrachtet, also das Erlebnis5 des "ich stoße" ausgeschlossen) genau so wirkt wie der Stoß eines sonstigen materiellen Dinges, ebenso der Fall meines Leibkörpers wie jeder andere Fall usw.
I2 (18b) 94 - Hua IV 62

El relativismo de las cosas espaciales en referencia a otras determina el sentido de la alteración de cosas. (Q.V.) Pero en ello no están comprendidas en modo alguno las condicionalidades psicofísicas. Esto tiene que tenerse en cuenta. Pero ahora, en los nexos causales interviene también, como es obvio, mi cuerpo: si es aprehendido como cosa en el espacio, entonces no es aprehendido como [63]mero esquema, sino /95/como punto de intersección de causalidades reales en el nexo real (exclusivamente cósico-espacial). A este dominio pertenece, por ejemplo, el hecho de que un golpe de mi mano (considerado puramente como golpe corpóreo de una cosa, esto es, con exclusión de la vivencia del "yo golpeo") actúa exactamente como el golpe de cualquier otra cosa material, e igualmente la caída de mi cuerpo corporal como cualquier otra caída, etcétera.