I2 (23) - Hua IV 101

Zu bemerken ist dabei (Q.V.), daß überall zwar das Vergegenständlichte und "ursprünglich" nicht Vergegenständlichte, z.B. das wahrgenommene und wahrnehmende reine Ich zu unterscheiden ist. Aber wie sehr sich damit [102]eine phänomenologische Wandlung ausdrückt hinsichtlich des cogito, das einmal unreflektiertes, ursprüngliches cogito ist, das cogito des ursprünglich vollziehenden reinen Ich, und das andere Mal reflektiertes, also wesentlich gewandeltes, intentionales5 Objekt oder Medium eines neuen Aktes, durch das hindurch das vollziehende Ich das Vollziehen des alten Aktes erfaßt: so ist doch evident, dank weiterer Reflexionen höherer Stufe, daß das eine und andere reine Ich in Wahrheit ein und dasselbe ist, nur eben einmal gegeben, das 10andere Mal nicht gegeben, oder in höherer Reflexion einmal schlicht gegeben, das andere Mal in einer weiteren Mittelbarkeitsstufe gegeben. Ebenso wie ja auch das ursprüngliche cogito selbst und das reflektiert erfaßte cogito dasselbe ist und mittelbar in einer Reflexion höherer Stufe als absolut das selbe zweifellos erfaßt 15werden kann.
I2 (23) 138 - Hua IV 101

Hay que advertir en ello (Q.V.) que por todas partes pueden en verdad diferenciarse lo objetivado y lo "primigeniamente" no objetivado, por ejemplo, el yo puro percibido y el percipiente. Pero por mucho que con ello [102]se exprese una variación fenomenológica respecto del cogito ---que una vez es cogito irreflejado, primigenio, el cogito del yo puro primigeniamente ejecutante, y la otra vez es reflejado, es decir, esencialmente mutado, objeto intencional o medio de un nuevo acto a través del cual el yo ejecutante capta el ejecutar del antiguo acto--- es no obstante evidente, gracias a ulteriores reflexiones de nivel superior, que el uno y el otro yo puros son en verdad uno y el mismo, sólo que precisamente una vez dado, la otra vez no dado, o, en reflexión superior, una vez simplemente dado, la otra vez dado en un nivel de mediatez ulterior. De igual manera, en efecto, también el cogito primigenio mismo y el cogito reflejadamente captado son el mismo, y mediatamente, en una reflexión de nivel superior, puede ser captado indudablemente como absolutamente el mismo.