I2 (25) - Hua IV 106

Jede attentionale10 Reihe ist als Reihe ein Strahlenartiges, und in jeder ist intentional "das selbe" erfaßt, es ist eine Reihe immer reicherer und vollkommenerer Erfassung ein und desselben: analog wie ich beim Näherkommen an ein Objekt, also in der entsprechenden Orientierungsreihe immer reichere Kenntnis vom Objekt gewinne,15 immer mehr von ihm und Besseres erfasse. Daher das Gleichnis: ich bringe mir die Sache (auch wenn sie unräumlich ist) näher. Sehen wir von dieser Analogie ab, so ist eine Steigerungsreihe gegeben und eine ideelle Annäherung an das vollkommen erfaßte Objekt, und das bei jedem Prozeß aufmerksamer20 Erfassung eines Objekts. Und alle diese Strahlen gehen erlebnismäßig von dem einen Auslaufspunkt, dem identischen Ich, aus
I2 (25) 142 - Hua IV 106

Toda serie atencional es, en cuanto serie, una suerte de rayo, y en cada una está captado intencionalmente "lo mismo"; es una serie de una captación cada vez más rica y más perfecta de uno y lo mismo: en forma análoga a como, en el acercarme a un objeto, o sea, en la correspondiente serie de la orientación, obtengo un conocimiento cada vez más rico del objeto, capto de él cada vez más y mejor. De ahí la metáfora: yo me aproximo[Nota al pie: * En alemán, el verbo aquí usado, näherbringen, que traduzco literalmente, significa también "explicarse algo", "familiarizarse con algo".] la cosa (aun cuando ésta sea inespacial). Si prescindimos de esta analogía, entonces está dada una serie gradual y un acercamiento ideal al objeto /143/perfectamente captado, y esto en todo proceso de captación atenta de un objeto. Y todos estos rayos parten vivencialmente del único punto de partida, del yo idéntico.