I2 (29) - Hua IV 111

Die Identität des reinen Ich liegt nicht nur darin, daß ich (wieder das reine Ich) im Hinblick auf jedes cogito mich als das identische Ich des cogito erfassen[112] kann, vielmehr: ich bin auch darin und a priori das selbe Ich, sofern ich in meinen Stellungnahmen notwendig Konsequenz übe in einem bestimmten Sinn; jede "neue" Stellungnahme stiftet eine bleibende "Meinung", bzw. ein Thema (ein 5Erfahrungsthema, ein Urteilsthema, ein Freudenthema, ein Willensthema), so daß ich von nun ab, so oft ich mich als denselben erfasse, der ich früher war, oder als denselben, der jetzt ist und früher war, auch meine Themata festhalte, sie als aktuelle Themata übernehme, so wie ich sie früher gesetzt habe.
I2 (29) 148 - Hua IV 111

La identidad del yo puro no solamente radica en que yo (de nuevo el yo puro) puedo captarme, con respecto a todo cogito, como el yo idéntico del cogito; [112]más bien: también soy, y a priori, el mismo yo, en tanto que en mis tomas de posición soy necesariamente consecuente en un sentido determinado; toda toma de posición /149/"nueva" instituye una "mención"[Nota al pie: * "Mención" = Meinung. Es de tomarse en cuenta, en este contexto, el significado corriente, no técnico, de Meinung como "opinión".] o un tema (un tema de experiencia, un tema judicativo, un tema de alegría, un tema volitivo) permanente, de modo que de ahora en adelante yo, siempre que me capte como el mismo que era antes, o como el mismo que ahora es y antes era, habré de mantener también sujetos mis temas, habré de asumirlos como temas actuales, tal como antes los he puesto.