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nun ist ein Unterschied zwischen den etwa auf eine Hand bezüglichen 30visuellen Erscheinungen und den taktuellen. Die linke Hand abtastend habe ich Tasterscheinungen, d.h. ich empfinde nicht nur, sondern ich nehme wahr und habe Erscheinungen von einer weichen, so und so geformten, glatten Hand. Die anzeigenden Bewegungsempfindungen und die repräsentierenden[145] Tastempfindungen, die an dem Ding "linke Hand" zu Merkmalen objektiviert werden, gehören der rechten Hand zu. Aber die linke Hand betastend finde ich auch in ihr Serien von Tastempfindungen, sie werden in ihr "lokalisiert", sind 5aber nicht Eigenschaften konstituierend (wie Rauhigkeit und Glätte der Hand, dieses physischen Dinges). Spreche ich vom physischen Ding "linke Hand", so abstrahiere ich von diesen Empfindungen (eine Bleikugel hat nichts dergleichen und ebenso jedes "bloß" physische Ding, jedes Ding, das nicht mein 10Leib ist). Nehme ich sie mit dazu, so bereichert sich nicht das physische Ding, sondern es wird Leib, es empfindet. Die "Berührungs"-empfindungen gehören zu jeder erscheinenden objektiven Raumstelle der berührten Hand, wenn sie eben an dieser Stelle berührt wird. Ebenso hat die berührende Hand, 15die ihrerseits wieder als Ding erscheint, ihre Berührungsempfindungen an der raumkörperlichen Stelle, wo sie berührt (bzw. von der anderen berührt wird). Ebenso: wird die Hand gezwickt, gedrückt, gestoßen, gestochen etc., von fremden Körpern berührt oder fremde Körper berührend, so hat sie ihre Berührungs-, 20Stich-, Schmerzempfindungen usw., und geschieht dieses durch einen anderen Leibesteil, so haben wir dergleichen doppelt in beiden Leibesteilen, weil jeder eben für den andern berührendes, wirkendes Außending ist und jeder zugleich Leib. Alle die bewirkten Empfindungen haben ihre Lokalisation, d.h. 25sie unterscheiden sich durch die Stellen der erscheinenden Leiblichkeit und gehören phänomenal zu ihr. Der Leib konstituiert sich also ursprünglich auf doppelte Weise: einerseits ist er physisches Ding, Materie, er hat seine Extension, in die seine realen Eigenschaften, die Farbigkeit, Glätte, Härte, Wärme 30und was dergleichen materielle Eigenschaften mehr sind, eingehen; andererseits finde ich auf ihm, und empfinde ich "auf" ihm und "in" ihm: die Wärme auf dem Handrücken, die Kälte in den Füßen, die Berührungs-empfindungen an den Fingerspitzen. Ich empfinde ausgebreitet über die Flächen weiter 35Leibesstrecken den Druck und Zug der Kleider; die Finger bewegend habe ich Bewegungsempfindungen, wobei eine Empfindungsausbreitung in veränderlicher Weise über die Oberfläche der Finger hingeht, aber in dem Empfindungskomplex ist zugleich ein Bestand, der im Innern des Fingerraums seine Lokalisation[146] hat. Die Hand liegt auf dem Tisch. Ich erfahre den Tisch als ein Festes, Kaltes, Glattes. Sie über den Tisch bewegend erfahre ich von ihm und seinen dinglichen Bestimmungen. Zugleich aber kann ich jederzeit auf die Hand achten und finde 5auf ihr vor Tastempfindungen, Glätte- und Kälteempfindungen usw., im Innern der Hand, der erfahrenen Bewegung parallel laufend, Bewegungsempfindungen usw. Ein Ding hebend erfahre ich seine Schwere, aber ich habe zugleich Schwereempfindungen, die ihre Lokalisation im Leib haben. Und so bietet überhaupt 10mein Leib, mit anderen materiellen Dingen in physische Beziehung tretend (Schlag, Druck, Stoß usw.) nicht bloß die Erfahrung physischer Vorkommnisse dar, auf den Leib und die Dinge bezogen, sondern auch spezifische Leibesvorkommnisse der Art, die wir Empfindnisse nennen. Solche Vorkommnisse15 fehlen den "bloß" materiellen Dingen.
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hay una diferencia entre las apariciones visuales y las táctiles referentes, por ejemplo, a una mano. Tentando la mano izquierda tengo apariciones táctiles, esto es, no solamente siento, sino que percibo y tengo apariciones de una mano blanda, lisa, formada así y asá. Las sensaciones de movimiento indicadoras y las [145] sensaciones táctiles representantes, que son objetivadas como notas en la cosa "mano izquierda", pertenecen a la mano derecha. Pero al tentar la mano izquierda encuentro también en ella series de sensaciones táctiles; éstas están "localizadas" en ella, pero no son constituyentes de propiedades (como aspereza y lisura de la mano, de esta cosa física). Si hablo de la cosa física "mano izquierda", entonces hago abstracción de estas sensaciones (una bola de plomo no tiene nada semejante e igualmente cualquier cosa "meramente" física, cualquier cosa que no es mi cuerpo). Si las tomo en cuenta, entonces la cosa física no se enriquece, sino que se vuelve cuerpo, siente. Las sensaciones-de-"toque" /185/pertenecen a todo sitio espacial objetivo aparente de la mano tocada, cuando es tocada precisamente en este sitio. Igualmente, la mano que toca, que por su lado aparece a su vez como cosa, tiene sus sensaciones de toque en el sitio corpóreo-espacial donde ella toca (o es tocada por la otra). Igualmente: si la mano es pellizcada, oprimida, golpeada, pinchada, etc., si es tocada por cuerpos ajenos o toca cuerpos ajenos, entonces tiene sus sensaciones de toque, de pinchadura, de dolor, etc., y si esto sucede por medio de otra parte del cuerpo, entonces tenemos lo mismo duplicado en ambas partes del cuerpo, porque cada una es para la otra precisamente cosa externa que toca, que produce efectos, y cada una es a la vez cuerpo. Todas las sensaciones ocasionadas tienen su localización, esto es, se diferencian por los sitios de la corporalidad aparente y pertenecen fenomenalmente a ella. El cuerpo, por ende, se constituye primigeniamente de manera doble: por un lado es cosa física, materia, tiene su extensión, a la cual ingresan sus propiedades reales, la coloración, lisura, dureza, calor, y cuantas otras propiedades materiales similares haya; por otro lado, encuentro en él, y siento "en" él y "dentro" de él: el calor en el dorso de la mano, el frío en los pies, las sensaciones de toque en las puntas de los dedos. Difundidas sobre la superficie de segmentos más vastos del cuerpo, siento la presión y la tirantez de la ropa; al mover los dedos tengo sensaciones de movimiento, y con ello la difusión de la sensación pasa de manera cambiante sobre la superficie de los dedos, pero en el complejo de la sensación hay a la vez un componente que tiene su[146] localización en el interior del espacio del dedo. La mano descansa sobre la mesa. Experimento la mesa como algo duro, frío, liso. Moviendo la mano sobre la mesa tengo experiencia de ella y de sus determinaciones cósicas. A la vez, empero, en todo momento puedo poner atención en la mano y encuentro en ella sensaciones táctiles, sensaciones de lisura y de frío, etc.; en el interior de la mano, corriendo paralelamente al movimiento experimentado, sensaciones de movimiento, etcétera. Al levantar una cosa experimento su peso, pero a la vez tengo sensaciones de peso que tienen su localización en el cuerpo. Y así en general mi cuerpo, al entrar en relación física con otras cosas materiales (golpe, presión, sacudida, etc.), no depara meramente la experiencia de sucesos físicos referidos al /186/cuerpo y a las cosas, sino también sucesos corporales específicos de la especie que llamamos ubiestesias. Tales sucesos faltan en las "meras" cosas materiales.