I2 (55) - Hua IV 219

25So überblicken wir das Feld der eigentlichen Ichtatsachen. Immer ist das Ich Subjekt von Intentionalitäten und darin liegt: ein Noema und ein noematisches Objekt ist immanent konstituiert ("Apperzeption"), ein Objekt bewußt gemacht, und insbesondere: ein als seiend gesetztes Objekt, 30das in seinem Wie bewußt ist, tritt in eine in einem neuen Sinn "intentionale" Beziehung zum Subjekt: das Subjekt verhält sich zum Objekt, und das Objekt reizt, motiviert das Subjekt. Das Subjekt ist Subjekt eines Leidens oder eines Tätigseins, passives oder aktives in Beziehung auf die 35noematisch ihm vorliegenden Objekte, und korrelativ haben wir von den Objekten ausgehende "Wirkungen" auf das Subjekt. Das Objekt "drängt sich dem Subjekt auf", übt auf es Reize (theoretische, ästhetische, praktische Reize), es will gleichsam Objekt der Zuwendung sein, klopft an [220]die Pforte des Bewußtseins in einem spezifischen Sinne (nämlich dem des Zuwendens), es zieht an, das Subjekt wird herangezogen, bis schließlich das Objekt Aufgemerktes ist. Oder es zieht praktisch an, es will gleichsam ergriffen sein, es ladet zum Genusse5 ein usw. Es gibt eine Unzahl solcher Beziehungen und eine Unzahl von noematischen Schichten, die das Objekt mit diesen Zuwendungen annimmt, die sich überlagern über das ursprüngliche Noema, bei Dingen das pure Dingnoema.
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Damos así un vistazo al campo de los hechos-de-yo propios. El yo es siempre sujeto de intencionalidades, y en ello radica: un nóema y un objeto noemático está inmanentemente constituido ("apercepción"), un objeto es hecho conciente, y en particular: un objeto puesto como existente, que es conciente en su cómo, entra en una referencia "intencional" al sujeto en un nuevo sentido: el sujeto se comporta hacia el objeto, y el objeto estimula, motiva al sujeto. El sujeto es sujeto de un padecer o de un estar activo, pasivo o activo en referencia a los objetos que están noemáticamente ante él, y correlativamente tenemos "efectos" /267/en el sujeto que parten de los objetos. El objeto "se impone al sujeto", ejerce sobre él estímulos (estímulos teóricos, estéticos, prácticos), quiere en cierto modo ser objeto del volverse, toca a [220] la puerta de la conciencia en un sentido específico (a saber, el del volverse), atrae; el sujeto es atraído, hasta que finalmente el objeto es atendido. O atrae prácticamente, quiere en cierto modo ser agarrado, invita al disfrute, etc. Hay un sinnúmero de tales referencias y un sinnúmero de estratos noemáticos que el objeto adopta con estos actos de volverse, los cuales se superponen sobre el nóema primigenio, en las cosas sobre el puro nóema de cosa.