I2 (56g) - Hua IV 233

Dabei (Q.V.) mag das Subjekt, wie es ja normalerweise tut (wo es 20nicht Einfühlung in eingebildete Subjekte und dgl. vollzieht), das eingefühlte Subjekt, den Nebenmenschen und seine Erlebnisse als Wirklichkeiten und als naturhafte Realitäten ansetzen, wie es sich selbst als solche Realität setzen kann, und dann kann sich ihm allerdings das Motivationsverhältnis in ein real-kausales25 verwandeln, das Motivations-Weil in ein reales Weil. Ich ärgere mich über den Lärm da draußen --- die Auffassung kann genau dieselbe sein wie: ich ärgere mich über den Gassenhauer, der mich in der Phantasie verfolgt. Im ersten Fall ist das Korrelat als wirklich gesetzt, im letzteren nicht. Und wo es als 30wirklich gesetzt ist, kann ich die Sachlage kausal verstehen, kaum merklich ist die Umänderung der Einstellung, obschon es eine wesentliche Änderung ist. Der reale Vorgang draußen wirkt kausal auf mich als Realität, das Fallen des Hammers erschüttert die Luft, die Erschütterungen erregen mein Gehörsorgan35 usw., und infolge davon wird in mir als realem Ich das Geräusch erweckt.
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En ello (Q.V.) el sujeto puede, como lo hace en efecto normalmente (cuando no ejecuta empatía de sujetos imaginados y similares), poner al sujeto empatizado, los congéneres y sus vivencias, como realidades y como realidades naturales, tal como puede ponerse a sí mismo como tal realidad, y luego puede, sin embargo, transformarse para él la relación de motivación en una relación real-causal, el porque-de-la-motivación en un porque real. Me /281/enfado por el ruido de allá afuera --- la aprehensión puede ser exactamente la misma que: me enfado por la tonada de moda que me persigue en la fantasía. En el primer caso el correlato está puesto como real, en el último no. Y donde está puesto como real, puedo entender la situación causalmente; el cambio de la actitud es apenas advertible, aunque es un cambio esencial. El proceso real afuera actúa causalmente sobre mí como realidad, la caída del martillo estremece el aire, los estremecimientos excitan mi órgano del oído, etc., y a consecuencia de ello se despierta en mí, como yo real, el ruido.