I2 (57) - Hua IV 248

Oder deutlicher: (Q.V.) Selbstwahrnehmung ist eine Reflexion (Selbstreflexion des reinen Ich) und setzt ihrem Wesen nach voraus ein unreflektiertes 5Bewußtsein. Das unreflektierte Ichleben mit Beziehung auf allerlei Vorgegebenheiten, auf eine ichfremde dingliche Umwelt, Güterwelt etc. nimmt eine ausgezeichnete Gestalt an, eben die der Selbstreflexion oder Selbstwahrnehmung, die also ein besonderer Modus des "Ich lebe" im allgemeinen Zusammenhang10 des Ichlebens ist. Näher ausgeführt nimmt es die Gestalt an: ich nehme wahr, daß ich dies oder jenes wahrgenommen habe und noch fort wahrnehme, daß dies oder jenes mich vorher unwahrgenommen affizierte, meine Aufmerksamkeit auf sich hingezogen hat, daß ich dabei noch fixiert bleibe, daß 15mich eine Freude bewegte und noch bewegt, daß ich einen Entschluß faßte und durchhalte usw. Durch solche Reflexionen weiß ich von meinem unreflektierten Ichleben, sie bringen mir Strukturen eines solchen in den Blickpunkt des Bemerkens.
I2 (57) 295 - Hua IV 248

O más distintamente: (Q.V.) la percepción de sí mismo es una reflexión (reflexión de sí mismo del yo puro) y presupone, conforme a su esencia, una conciencia irreflejada. La vida de yo irreflejada, con referencia a toda clase de predaciones, a un mundo circundante cósico ajeno al yo, a un mundo de bienes, etc., adopta una señalada configuración, precisamente la de la reflexión de sí mismo o percepción de sí mismo, la cual es por ende un modo particular del "yo vivo" en el nexo general de la vida de yo. Expuesto con más precisión, adopta la configuración: yo percibo que he percibido esto o aquello y aún lo percibo continuamente; que esto o aquello que antes me afectaba sin ser percibido, ha atraído mi atención sobre sí; que aún permanezco fijo en ello; que una alegría me movió y aún me mueve; que formulé una decisión y la mantengo, etc. Mediante tales reflexiones sé de mi vida de yo irreflejada; ellas me traen estructuras de tal vida al foco visual del advertir.