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30Hierbei gibt sich das Ding immerfort als etwas, was so und so ist, mögen auch keine Begriffe, keine Urteile im prädikativen Sinne vermitteln. Immer achten wir auf irgend welche "Merkmale", und während wir das Ding unter dem Gesichtspunkt des einen Merkmals betrachten, steht es zugleich intentional da als 35mit anderen Merkmalen ausgestattet; zum Teil sind es bestimmte, [21]schon im Wahrnehmungsfeld unerfaßt liegende, wir brauchen nur einen erfassenden Blick darauf hinzusenden, um die Intentionen zu erfüllen, oder sonst in bestimmt oder unbestimmt erfassende, wenn auch anschaulich nicht gebende zu verwandeln, was in letzterer 5Hinsicht natürlich für das Unsichtige vom Ding gilt. Teils sind sie unbestimmte. In diesem Falle werden Horizonte und ev. bestimmt gerichtete Meinungsstrahlen reaktiviert, die in Form nicht-aktivierter "Verworrenheiten" zum Auffassungssinn beitrugen. Doch braucht --- wie bereits erwähnt --- die Analysis 10keine Reaktivation zu sein. Freilich wird man sagen können, daß keine Analysis hervorheben kann, was nicht verborgen in gewisser Weise schon in impliziter Synthesis impliziert war, daß wir nur Teile herausheben können, wo wir unter Änderung der Auffassung Teile hineingemeint haben, sei es auch in 15Form verworrener Mitmeinungen. So verschiebt sich ja beständig unsere Dingauffassung, sie nimmt Auffassungsmomente innerhalb des einheitlichen Stils, den das Dingbewußtsein vorschreibt, auf; nachkommende Explikation verwandelt dann die verworrene Mitauffassung in eine ev. thematische Thesis, eine theoretische 20Erfassung, mit der sich zumeist auch Näherbestimmung und in eins mit den kinaesthetischen Verläufen nähere Veranschaulichung paaren wird. Sofern aber solche Auffassungsänderungen im voraus bei dem Wesen der Dingauffassung möglich sind (aber nicht leere sondern motivierte Möglichkeiten), sind "implizite" 25Teilauffassungen vorhanden, die doch nicht in der ursprünglichen Auffassung reell vertreten waren.
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Aquí la cosa se da continuamente como algo que es así y asá, aun sin la mediación de ningún concepto, de ningún juicio en el sentido predicativo. Nos fijamos siempre en alguna "nota", y mientras miramos la cosa bajo el punto de vista de esta única nota, la cosa está ahí a la vez intencionalmente como provista de otras notas; éstas están en parte determinadas: [21]se encuentran ya, no captadas, en el campo de la percepción, y sólo necesitamos echarles una mirada captadora para cumplir las intenciones o, si no, para convertirlas en intenciones determinada o indeterminadamente captadoras, aunque no intuitivamente dadoras, lo que en última instancia vale también naturalmente para lo no visto de la cosa. En parte están indeterminadas. En este caso se reactivan horizontes y eventualmente rayos de mención determinadamente dirigidos que en forma de "confusiones" no-activadas contribuyeron al sentido aprehensivo. Sin embargo, el análisis ---como ya se mencionó--- no necesita ser una reactivación. Ciertamente, podrá decirse que ningún análisis puede poner de relieve lo que no estaba ya en cierta manera ocultamente implicado en una síntesis implícita; que solamente podemos sacar fuera partes donde, bajo cambio de la aprehensión, hemos mentado partes dentro, así sea en forma de co-menciones confusas. Así, en efecto, se desplaza constantemente nuestra aprehensión de cosas, acogiendo momentos aprehensivos dentro del estilo unitario que le prescribe la conciencia de cosas; la explicitación subsiguiente convierte entonces la co-aprehensión confusa en una tesis eventualmente temática, en una captación teórica con la que la mayoría de las veces se emparejan también una determinación más precisa y, a una con los cursos cinestésicos, una intuitivación más estrecha. Pero en tanto que tales cambios aprehensivos son de antemano posibles por la esencia de la aprehensión de cosas (pero posibilidades no vacías, sino motivadas), hay aprehensiones parciales /51/"implícitas" que, sin embargo, no figuraban efectivamente en la aprehensión primigenia.