IP (C) - Hua II 7

Zunächst schon die Cartesianische cogitatio bedarf der phänomenologischen Reduktion. Nicht das psychologische Phänomen in der psychologischen Apperzeption und Objektivation ist wirklich eine absolute Gegebenheit, sondern nur das reine Phänomen, das reduzierte. Das erlebende Ich, das Objekt, 15der Mensch in der Weltzeit, das Ding unter Dingen etc. ist keine absolute Gegebenheit, also auch nicht das Erlebnis als sein Erlebnis. Wir verlassen endgiltig den Boden der Psychologie, selbst der deskriptiven.
IP (C) 97 - Hua II 7

Ante todo, la cogitatio cartesiana misma precisa de la reducción fenomenológica. El fenómeno psicológico en la apercepción y la objetivación psicológicas no es realmente un dato absoluto, sino que sólo lo es el fenómeno puro, el fenómeno reducido. El yo que vive, este objeto, el hombre en el tiempo mundanal, esta cosa entre las cosas, no es dato absoluto alguno; luego tampoco lo es la vivencia como vivencia de él. Abandonamos definitivamente el suelo de la psicología, incluso el de la psicología descriptiva.