PW (N3) - Hua XXV 18

Was soeben (Q.V.) in allgemeiner Andeutung gesagt und insbesondere, was von der nahen Affinität von Psychologie und Philosophie gesagt wurde, stimmt allerdings sehr wenig zu der modernen exakten Psychologie, die der Philosophie so fremd ist wie nur irgend möglich.5 Aber wie sehr diese Psychologie sich um der experimentellen Methode willen für die einzig wissenschaftliche halten und auf die "Schreibtisch-Psychologie" herabsehen mag: die Meinung, sie sei die Psychologie, die psychologische Wissenschaft im vollen Sinne, muß ich für eine folgenschwere Verirrung erklären. Der durchgehende10 Grundzug dieser Psychologie ist die Beiseiteschiebung jeder direkten und reinen {303}Bewußtseinsanalyse --- nämlich der systematisch zu vollziehenden "Analyse" und "Deskription" der in den verschiedenen möglichen Richtungen immanenten Schauens sich darbietenden Gegebenheiten --- zugunsten all der indirekten Fixierungen15 psychologischer oder psychologisch relevanter Tatsachen, die ohne eine solche Bewußtseinsanalyse einen mindestens äußerlich verständlichen Sinn haben. Für die experimentelle Feststellung ihrer psychophysischen Regelmäßigkeiten langt sie eben mit rohen Klassenbegriffen wie Wahrnehmung, Phantasieanschauung, Aussage, 20Rechnen und Verrechnen, Größenschätzen, Wiedererkennen, Erwarten, Behalten, Vergessen usw. aus; wie freilich auch umgekehrt der Fond von solchen Begriffen, mit dem sie operiert, ihre Fragestellungen und die ihr zugänglichen Feststellungen umgrenzt.
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Lo que acabamos de decir (Q.V.) en general y especialmente lo que afirmamos sobre la íntima afinidad entre la psicología y la filosofía, concuerda por cierto muy poco con la psicología exacta moderna, que está lo más lejos posible de la filosofía. Con todo, a pesar de las pretensiones de esta psicología de ser, a causa del método experimental, la única psicología científica, a pesar de su desdén para la 'psicología académica', debo declarar que es errónea la opinión que la considera como la psicología, la ciencia psicológica por excelencia ---error de graves consecuencias. El principio constante de esta psicología es rehuír todo análisis directo y puro de la conciencia---, es decir, el 'análisis' y la 'descripción' (que deben ser realizados sistemáticamente) de los datos que se presentan en las diversas direcciones posibles del contemplar inmanente ---en favor de todas las fijaciones indirectas de los hechos psicológicos o derivados de la psicología, que sin tal análisis de la conciencia tienen un sentido inteligible, al menos exteriormente. Para comprobar experimentalmente esas regularidades psicofísicas, ella se conforma justamente con burdos conceptos de clase tales como percepción, visión de la fantasía, enunciación, cálculo, error de cálculo, estimación de magnitudes, reconocimiento, expectación, retención, olvido, etc. Del mismo modo, también por otro lado, el fondo de tales conceptos con que ella opera limita los problemas que se plantea y las comprobaciones de que es capaz.