Canto de Amor a Alemania

 

Te he amado con el amor del viajero

corazón en el estribo y canto en las alforjas

 

Siempre se ama con el tiempo contado,

llegares y distancias

 

Has sido una amada exasperante,

quisquillosa, fría y ardiente a destiempo,

lo más cercano a mí en tus excesos,

lo más lejano a mí en tu soledad

 

No hay vida sin cicatrices; me asombras y me dueles

y tu vigor me da esperanza y miedo.

Vivir en ti es regreso y es perderse,

no nos hemos conocido

 

En esta tarde cuando el calor huye,

tomo el tren a Salzburgo;

puedo despedirme vertiginosamente

mientras el paisaje se alarga

en la calma que da

la inseguridad

del amor.

 

Chiemsee, 2002.